Las autoridades del centro de Veteranos de Guerra de Malvinas de Río Grande se niegan a dar respuesta
25.03.2019
Coptados por la gobernadora Rosana Bertone y por el proceso electoral que tiene a la mandataria como candidata a la reelección, las autoridades del centro de Veteranos de Guerra Malvinas Argentinas de Río Grande, se niegan a convocar a una Asamblea General de socios para explicar las razones por la cual adhirieron a la Confederación de excombatientes de Malvinas, a dar cuenta de la utilización de los fondos provenientes de la Ley Provincial N° 407 y porqué acompañan al Proyecto de Ley Malvinas que Bertone elevó al Congreso de la Nación.
Las autoridades del Centro de Veteranos de Guerra Malvinas Argentinas de Río Grande que preside Roma Alancay, se niega a convocar a una asamblea general de asociados para explicar los motivos por el cual, sin convocar a una asamblea general; decidieron adherir a la Confederación de excombatientes de Malvinas, pese a que esta entidad no cuente con personería jurídica nacional habilitante; siendo que a fines de 2017 en Asamblea se decidió no adherir a esa Confederación, no solo por los antecedentes de muchos de sus integrantes, sino porque desde su creación su única preocupación ha sido monetaria y porque su conducción habían mantenido hasta mitad de 2018, absoluto silencio frente a las políticas de entrega de soberanía a Gran Bretaña que viene ejecutando el gobierno de Mauricio Macri.
Esta situación no es reciente, así vienen procediendo desde agosto del año pasado, cuando también, sin decidir en Asamblea, resolvieron sacar al Centro del Consejo Asesor Observatorio Cuestión Malvinas. Incorporación que sí se había resuelto bajo un proceso asambleario.
Como ustedes saben y les consta, la segunda semana de marzo, solicité formalmente por correo electrónico, se convoque a Asamblea General y ante las evasivas, la semana pasada envié CARTA DOCUMENTO. Pero, aun así; siguieron insistiendo en querer dar explicaciones personales y se niegan exponer y fundamentar de manera colectiva.
Peor aún, tampoco quieren informar en qué utilizarán los fondos que el gobierno de la provincia le entregó hace 15 días (podría tratarse de un cheque 1,7 millones de pesos y otros importes), supuestamente como rendición parcial de los fondos que el Estado fueguino retiene a los combatientes mensualmente de la pensión honoraria por Ley N° 407, en un porcentaje del 2,5 %, y que los combatientes tenemos la obligación de volcarlos, como destino exclusivo; a la comunidad y no destinarlo para otra cosa, como la ampliación del edificio de Gaucho Rivero y O’Higgins, como es la intensión manifestada por algunos de sus miembros.
Llamativamente, cuando advertí que el Centro no puede ni debe utilizar los fondos para otro fin que la ley establece, el prosecretario de la institución Raúl Villafañe preguntó porqué planteaba no utilizar ese dinero para ampliar la sede, cuando no me había denunciado al Centro de Excombatientes de Malvinas en Ushuaia, cuando compraron con esa partida, una camioneta. Asunto que nunca estuvo en mi conocimiento -tampoco tengo responsabilidad de saberlo- asunto que, de ser así; se trataría de una malversación de fondos.
La Comisión que preside Alancay tampoco quiere debatir sobre la inconveniencia y peligrosidad del PROYECTO DE LEY MALVINAS que la gobernadora Bertone envió al Congreso de la Nación a tan solo 100 días de una elección en la que busca ser reelecta. Ley que de ser aprobada significará avalar los ACUERDOS DE MADRID, el ACUERDO FORADORI DUNCAN y todos los PACTOS firmados sin darle intervención al Congreso, por lo gobiernos de Carlos Menem y ahora el de Mauricio Macri.
De esta manera, las autoridades del Centro imitan a Gran Bretaña, a Macri y a Bertone.
1) Gran Bretaña se niega a sentarse con Argentina a discutir la soberanía de las Islas, en los términos establecidos por las Naciones Unidas, como máximo organismo internacional al cual tienen la obligación de respetar. 2) Macri como Menem, firma acuerdos que no fueron debatidos públicamente, ni dados a conocer ni a la sociedad, pero que significa concesiones comerciales, económicas, militares y estratégicas a favor de los ingleses. Y para ello, avanzaron sin darle intervención al Congreso de la Nación, como constitucionalmente está obligado. 3) La imposición es tal, que Bertone se negó a informar al pueblo de Tierra del Fuego, no dio a conocer oficialmente la magnitud del despojo, no defendió en tiempo y forma los derechos soberanos de Malvinas, mientras Macri permitía el afianzamiento del enemigo histórico en el Atlántico Sur -o sea dentro de nuestra provincia- y menos aún a debatir. Ni siquiera tuvo el respeto de escuchar las advertencias que se le hicieron en 2016, 2017 y 2018. 4) Por el mismo camino, sin debatir, sin convocar a una Asamblea y sin escuchar a quienes nos venimos ocupando y oponiendo a tan desgraciada y repugnante entrega, la Comisión del Centro, toma decisiones que avergüenzan a los camaradas muertos en combate. Honrar a los héroes es lo primero y principal, y para ello es necesario estar informados sobre cómo se mueve el enemigo, tanto en el campo de batalla como ahora en el campo de la diplomacia; y tener claramente detectado quienes son los colaboracionistas, los traidores y los desertores. Así se es combatiente las 24 horas de días, los 365 días del año y hasta el final de nuestra existencia, dignos de nuestros camaradas muertos. Hacer lo que se debe hacer y no lo que conviene. Hacer lo que se debe hacer y no estar en los actos para engordar el ego personal o para favorecer a los oportunistas de turno.
Lo único que se le pide a esta Comisión es Respeto. Respeto por quienes sí nos ocupamos y decidimos seguir siendo combatientes, y mucho más respeto, por quienes entregaron la vida defendiendo lo que Macri con la complicidad de Bertone, viene entregando a Gran Bretaña. Con ellos es nuestra obligación. Con nadie más. Menos aún con una gobernadora que usa descarada, política y electoralmente la CAUSA MALVINAS, a la GESTA que tiene como protagonistas centrales a los que dieron la vida, a los que efectivamente estuvimos en acciones de combate, a quienes experimentamos en carne propia las consecuencias de la guerra y a quienes vivimos con ese legado libertario como razón de nuestras vidas.
El 2 de abril va a pasar, como pasará el Gobierno de Macri, el de Bertone y la gestión de Alancay. Pero cuando se asiente todo este polvaredal y con toda desnudez pueda identificarse los estragos de esta política, nos daremos cuenta a donde vamos con todo este sometimiento y sumisión a la que alegremente se deja arrastrar esta Comisión de Veteranos.
Ninguna elección podrá equiparse con el sacrificio y con la entrega de los 649 compañeros. Ninguna.
Por el mismo camino, con el mismo y único interés que he venido planteando desde la década de los 90 y que vengo ratificando con mayor énfasis desde 2016 a la fecha, a través de todas y cada una de las acciones, advertencias y denuncias contra las medidas y omisiones que ponen en el mismo sitial que inauguró el anglófilo y antipatria de Bernardino Rivadavia, a Mauricio Macri y Rosana Bertone; le he solicitado a la UNIVERSIDAD NACIONAL DE TIERRA DEL FUEGO y esta ha aceptado, de abrir y generar el debate que el gobierno se niega a efectuar, con la complacencia Alancay y compañía. De tal manera, este próximo viernes 29 en Río Grande, el Consejo Superior de la UNTDF decidirá académicamente un plan de abordaje del Proyecto de Ley Malvinas de Bertone, para que la ciudadanía pueda escuchar, entender y razonar cuales son las consecuencias que persigue.
Nadie puede negar, nadie; que Bertone se sometió al más absoluto silencio durante más de tres años y a tan solo 100 días de una elección, le da un brote patriótico y malvinero y presenta un proyecto de Ley que no revertirá nada de lo que Menem inauguró y que Macri consolida a favor de los británicos. Proyecto que, si no tiene fines electorales, la gobernadora por respecto, debería correr para después de junio.
Daniel Guzmán
Fuente: CONSENSO PATAGONICO