PABLO CHENA : La Corriente Federal plantea un modelo alternativo al neoliberalismo
22.04.2018
El reciente encuentro de la Corriente Federal de Trabajadores en la ciudad de Santa Fe dejó un contundente mensaje sobre la actualidad política, económica y sindical. Paralelamente, hubo un enriquecedor trabajo en cuatro comisiones que tuvieron una gran participación donde los ejes fueron la marcha de la economía nacional y el trabajo, la situación de las economías regionales, la cuestión tributaria y el análisis del presente sindical y el rol de la Corriente Federal en ese contexto.
Pablo Chena, es economista, coordinador de los equipos técnicos de la CFT, encargado en el encuentro en Santa Fe de unos de los discursos de apertura, también participó del cierre con las conclusiones básicas del trabajo en comisiones.
Consultado sobre ese trabajo remarcó que “hay una consciencia de que la unidad tiene que ser a través de un programa. Lo expresan los dirigentes y es también lo que expresan las bases del interior”.
“Hay una necesidad de un programa que sintetice un proyecto de país con bases sólidas y que pueda disputar a otro proyecto de país que se nos quiere imponer desde una lógica financiera. Hay cada vez más consciencia de que los trabajadores en ese escenario no tienen futuro. La Corriente Federal plantea un modelo de país alternativo y expresa claramente que con el neoliberalismo no se puede negociar” afirma.“La CFT nace de los gremios, pero intenta excederlos. Plantea un modelo de país que incluye a los trabajadores, pero también a los sectores productivos que se ven afectados por estas políticas y hacen al desarrollo del país” aseveró al trabajo que viene realizando este espacio sindical de generar lazos con otros actores también perjudicados por las actuales políticas. Cooperativistas, pequeños y medianos empresarios como parte necesaria de una alianza en busca de un desarrollo nacional, con más producción, con un mercado interno robusto y puestos de trabajo en industrias argentinas en vez de generarlos en el extranjero
.
LA SITUACIÓN POLÍTICA REGIONAL: “LAS OLIGARQUÍAS REGIONALES TOMAN UN MODELO ECONÓMICO IMPORTADO”
Latinoamérica atraviesa un proceso político donde los sectores conservadores, oligárquicos, van recuperando el terreno político que habían resignado a mano de gobiernos populares. En algunos casos por las urnas, en otros con los denominados “golpes blandos” o parlamentarios como el caso de Brasil con Dilma Rousseff y Paraguay con Fernando Lugo. En esa lógica se puede comprender la proscripción de Lula mediante causas judiciales flojas de papeles.
Chena visualiza dos grandes fuerzas en pugna, “estamos frente a dos bloques de poder. Uno consolidado desde las oligarquías que toma un modelo económico importado. Las élites latinoamericanas lo que hacen es importar el neoliberalismo que ya se impuso en los países desarrollados y que es un muy buen modelo para los ricos. Lo tratan de imponer acá pero el pueblo también tiene sus organizaciones”.
Desde los años setenta el avance del neoliberalismo y su lógica financiera ha sido indetenible a nivel planetario. El ciclo de gobiernos populares en estas latitudes lograron poner un freno a la voracidad neoliberal, pero la lucha es ante un contrincante con un enorme poderío económico, comunicacional y judicial con una minoría local como socia encargada de defender esos intereses y sus privilegios.
Chena admite, “hoy el neoliberalismo es un sistema económico, político y social muy difícil de combatir en el mundo”. Sin embargo no plantea un escenario de resignación.
“Hay que avanzar en la resistencia, pero con propuestas y es lo que hace la Corriente. Mostrando que al neoliberalismo se lo combate mostrando ese otro proyecto de país que en algunos lugares del planeta parece haber desaparecido del imaginario. En Argentina no ha sido así porque está el peronismo, porque hay memoria histórica, porque tuvimos hasta el 2015 un gobierno peronista. Eso nos permite tener basamentos históricos más cercanos para reivindicarnos” argumenta.
“Hay que plantear este modelo alternativo en el Congreso que es uno de los pocos espacios democráticos para hacerlo. Urge plantear algo respecto al endeudamiento. El Gobierno dice que de este modelo de desarrollo vamos a ver sus éxitos en 20 años, pero en los hechos ellos no lo creen. Se preparan para una crisis. Necesitamos herramientas para que los trabajadores no paguemos la crisis, por eso insistimos con la reforma tributaria, en frenar el endeudamiento externo sin dejar de pensar herramientas como el control de precios, leyes de abastecimiento” propone Chena.
“LA IDEA DEL GOBIERNO ES QUE EL ENDEUDAMIENTO EXTERNO LO TERMINEN PAGANDO LOS TRABAJADORES”
El sideral endeudamiento externo que está tomando Argentina la pone al tope del ranking de los países que más deuda han contraído en los últimos dos años. El combustible necesario para que aún funcione la endeble economía macrista y que maquilla los profundos desbarajustes del plan económico.
El gran interrogante que se plantea es ¿cuánto puede durar? ¿Cuánto falta para que las inconsistencias económicas terminen estallando por los aires como ha ocurrido en otras etapas de la historia en que prosperaron estas ideas en nuestro país?
Chena observa que aún hay margen para seguir generando un mayor endeudamiento.
“Argentina tiene mucho camino para endeudarse aún” asevera. “Hay canillas en ese línea que no usa como la del FMI, hay un Estado con activos y tiene nuevos sistemas de endeudamiento como los contratos de Participación Público Privada (PPP) para la obra pública” completa.
¿Cuál es límite? ¿Por qué los acreedores siguen prestando dinero a Argentina cuando marcha hacia un evidente desbarajuste macroeconómico?
“El crecimiento de esta deuda es impagable, pero como toda burbuja financiera los mercados financieros hacen apuestas donde todos saben que es insostenible para todos pero cada uno cree que es sostenible para él. Se juega como en un casino, algunos se retiran a tiempo y hacen mucha plata y a otros los agarra la crisis que la terminan pagando los pueblos” describe.
“Lo que quiere garantizar este Gobierno es que la crisis que se venga no la van a pagar los ricos ni los capitales extranjeros. La idea es que el endeudamiento lo van a pagar los trabajadores” concluye.
Fuente: Sindical Federal