Sin armas para enfrentar a Javier Milei, Mauricio Macri le declaró la guerra al entorno presidencial

RELANZAMIENTO PRO

Sin armas para enfrentar a Javier Milei, Mauricio Macri le declaró la guerra al entorno presidencial

La visita a Olivos no moderó su discurso. Elogios al rumbo económico y críticas a Karina Milei y Santiago Caputo, pero sin nombres. Le falta equipo, acusó.Mauricio Macri: Les pido a los argentinos que sigamos apoyando al Presidente en esta cruzada por el cambio.

Mauricio Macri le declaró la guerra al "entorno" de Javier Milei en su regreso formal a la conducción del PRO. Carente de todas las armas para enfrentar al Presidente, el exmandatario moldeó un discurso para poner al macrismo a disposición de La Libertad Avanza (LLA), con fusión descartada, pero con condicionamientos. "Lo que pudimos ayudar (al Gobierno) fue a pesar de su entorno", cargó.

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No dio nombres y no hizo falta. El expresidente mantiene un enfrentamiento con la secretaria general de la Presidencia, Karina Milei, y con el asesor presidencial Santiago Caputo. En la previa del evento, el consultor había roto su silencio para -llamativamente- elogiar a Macri. "Conmigo en particular siempre ha sido extremadamente generoso". Movimiento de anticipación sin resultados a la vista.

El fundador del PRO le había adelantado parte del contenido de su discurso a Milei el lunes, en la charla a solas que mantuvieron en la Quinta de Olivos. El reencuentro no moderó los reproches que, hasta ahora, el exmandatario hacía en privado y este jueves hizo públicos. A Caputo, por caso, lo acusa de esparcir mentiras sobre posibles acuerdos y hasta de "operaciones mediáticas" en su contra. "Por algo tuvo que salir a decir que Mauricio es el impulsor del cambio", manifestó un miembro de la mesa del exmandatario cuando la acusación vio la luz.

El dardo de Mauricio Macri al entorno de Javier Milei

No fue la única queja de Macri a la administración libertaria. Fue un paso más allá en su cruzada y la acusó de mantener en cargos claves a dirigentes que responden al ministro de Economía de la gestión anterior. "No puede ser que haya muchos organismos que todavía están en manos de gente de Sergio Massa", reprochó. Por lo bajo, el exmandatario sospecha de un acuerdo subterráneo entre la dupla Karina-Caputo con el excandidato presidencial de Unión por la Patria.

Sin detonar todos los puentes con el Presidente, en gran parte debido a una situación de debilidad porque sabe que está perdiendo electorado con LLA, Macri confrontó directamente con la gestión libertaria desde el inicio de su discurso. El primer reproche fue por falta de experiencia que visualiza en el Gobierno. "Milei tiene ideas, convicción y coraje, pero sigue teniendo pendiente el desafío de construir un equipo", lanzó.

No fue un lamento explícito por el fallido Pacto de Acassuso sellado para de cara al ballottage, luego del cual las incorporaciones la Gobierno fueron "a título personal" y no orgánicas. Macri quiso dejarlo en claro: "Antes de casarte, tenés que convivir. A Milei se lo dije, pero con otras palabras", bromeó al rechazar una vez más una fusión PRO-LLA que podría desdibujar su liderazgo.

"Somos un partido preparado para ejecutar las ideas", afirmó Macri en clara alusión a las falencias que señala en la gestión Milei. Evitó la autocrítica que sugiere no haber podido ser reelecto en 2019. El reproche interno se lo dedicó, como otras veces, a la interna que carcomió a Juntos por el Cambio (JxC) en los años del Frente de Todos (FdT).

Con un claro problema con las formas del mileísmo, Macri dejó claro las coincidencias con el fondo. "Las medidas económicas de Milei son las que el PRO pregonó durante mucho tiempo", se jactó el titular del partido amarillo. Y apuntó que "hay una debilidad de Milei en la forma de ejecutar las ideas". "Desde el PRO ponemos a su alcance las herramientas de gestión con las que tenemos experiencia", pidió pista.

La debilidad del PRO frente a LLA

Macri insiste con que cualquier conversación en términos electorales con Milei y LLA debe ser en un escenario de igualdad de condiciones. El PRO tiene más despliegue territorial que el espacio libertario. Lo dejó en claro la tropa que este jueves desfiló sobre el escenario: intendentes, legisladores y gobernadores. Sin embargo, la Casa Rosada hoy se queda con todo el espectro político del antikirchnerismo, por lo que no le deja espacio al macrismo para volver a crecer en términos de intención de voto.

Por eso, Macri insiste con una crisis de identidad del PRO que sus bases están debatiendo. "Lo que queremos es mostrarle a la sociedad que hay una opción a lo que propone Milei y el kirchnerismo", dijo un integrante de la mesa chica del expresidente. La pelea con LLA es por los simbolismos: "Fuimos los primeros en hablar sobre la libertad hace 20 años", afirmó el intendente de General Pueyrredón, Guillermo Montenegro.

Las ideas del Milei fueron primero del PRO

Esa visión del jefe comunal, que fue uno de los primeros en hablar durante el evento, continuó con el resto de los expositores que prologaron el discurso de Macri. La baja de impuestos fue otro de los tópicos que se repitió a lo largo de la tarde. "La clave del evento fue dejar en claro que las ideas que pregona Milei antes estuvieron en el PRO y que ahora la sociedad está dispuesta a escucharlas", sostuvo un integrante del macrismo línea fundadora.

En su discurso, que ensayó el martes para evitar errores, buscó dejar en claro que el apoyo del PRO a la administración de Milei no es incondicional.

El encuentro convocó a la plana mayor del macrismo con los faltazos con aviso de la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, y del exjefe de Gobierno porteño Horacio Rodríguez Larreta. Ambos rechazaron la invitación. Macri tolera al exalcalde, pero quiere eyectar del PRO a la funcionaria del gobierno libertario.

La línea divisoria es la fusión. "El PRO está para hacer grandes cambios. No estamos para buscar el poder por el poder mismo, como el peronismo. Y el que quiera un cargo en el Gobierno, que vaya a dejar el CV a la Casa Rosada. Nosotros no estamos para eso", dijo el presidente de la asamblea del PRO, Martín Yeza. Fue quien ocupó la silla que había sido prometida a Bullrich.

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Fuente: Letra P