El "canciller" del papa Francisco se reunió con Macri en Olivos
05.11.2017
Un paso hacia el afianzamiento de las relaciones con el Vaticano dio hoy el presidente Mauricio Macri, al recibir en Olivos al canciller de la Santa Sede, el arzobispo británico Paul Richard Gallagher, que ocupa el tercer cargo más importante en la Curia romana.
Gallagher le transmitió a Macri las condolencias de la Santa Sede por la muerte de cinco argentinos en el reciente atentado en Nueva York y su satisfacción por el liderazgo que viene asumiendo la Argentina en la región y en el mundo "Es notable el papel que está tomando el país", señaló, al describir que así lo muestran los compromisos asumidos para encabezar, a partir de diciembre, el G-20 y ser anfitrión de la próxima reunión de la Organización Mundial de Comercio.
El secretario para las Relaciones con los Estados del Vaticano llegó invitado por el gobierno argentino y concurrió a Olivos con el nuncio apostólico, monseñor Emil Paul Tscherrig, y el sacerdote italiano Ignazio Ceffalia, que tiene a su cargo en la Secretaría de Estado las relaciones de la Santa Sede con la Argentina, Uruguay y Chile. Macri llegó al encuentro desde su quinta Los Abrojos, de Pilar, y lo acompañaron en la reunión el canciller Jorge Faurie; el embajador ante la Santa Sede, Rogelio Pfirter; el secretario de Asuntos Estratégicos, Fulvio Pompeo; el secretario de Culto, Santiago de Estrada, y el subsecretario del área, Alfredo Abriani.
El encuentro se extendió durante 40 minutos, en un clima de cordialidad, y sobre el final, Macri comentó que el papa Francisco "no necesita invitación para venir a la Argentina". Coincidió con Gallagher en que lo hará en el momento en que lo considere oportuno, tal como lo había expresado el canciller del Vaticano hace unos días en una entrevista con la corresponsal de LA NACION en Roma. " Franciscoestá muy cerca del pueblo argentino y siempre lo tiene presente en sus intenciones y en sus misiones", dijo el arzobispo al jefe del Estado.
Fuentes de la Casa Rosada indicaron que el Presidente le contó al arzobispo británico las políticas iniciadas para combatir el narcotráfico, la corrupción y la pobreza. "Le mostró el orgullo que sentía por impulsar en la Argentina la recuperación de la cultura del trabajo" y resumió el llamado que hizo el lunes pasado a distintos sectores del país en el Centro Cultural Kirchner para "establecer acuerdos básicos para crecer sostenidamente". Gallagher dijo que el Santo Padre coincidía con esa preocupación y con la idea de volver al espíritu de nuestros abuelos". Y se refirió al resultado de las últimas elecciones, al señalar que "el pueblo entendió las intenciones" del Presidente y le dio su respaldo.
Monseñor Gallagher mantuvo después una reunión con el canciller Faurie en el Palacio San Martín y ambos señalaron su preocupación por la situación de Venezuela. Destacaron, además, la importancia del fortalecimiento de las relaciones entre el Mercosur y la Unión Europea.
Luego hubo un almuerzo, al que se sumaron el presidente del Episcopado, monseñor José María Arancedo; el vicepresidente segundo, Mario Cargnello, y el secretario general, Carlos Malfa, además del presidente provisional del Senado, Federico Pinedo; los ministros de Desarrollo Social, Carolina Stanley, y de Trabajo, Jorge Triaca, y el vicecanciller Daniel Raimondi.
Mañana, a las 11, el arzobispo Gallagher celebrará una misa en la Catedral, junto con el arzobispo de Buenos Aires, cardenal Mario Poli, y otros obispos. Y el lunes, a las 11, el canciller de la Santa Sede se reunirá con el jefe de Gabinete, Marcos Peña, en la Casa Rosada.
Fuente: Infobae