Cristina Kirchner y el futuro del peronismo: unidad y desafíos electorales
31.05.2025
El Partido Justicialista define su futuro electoral. Cristina Kirchner se pone al frente del armado peronista. En la antesala al cierre de listas, continúa la discusión por el desdoblamiento en Buenos Aires. Las condiciones de la unidad, la incógnita de las candidaturas y la advertencia de Massa.
Cristina Kirchner encabezó esta semana una reunión del Consejo Nacional del Partido Justicialista.. Imagen: AFP
El Partido Justicialista define su futuro electoral.
Cristina Kirchner se pone al frente del armado peronista.
En la antesala al cierre de listas, continúa la discusión por el desdoblamiento en Buenos Aires. Las condiciones de la unidad, la incógnita de las candidaturas y la advertencia de Massa.
Cristina Kirchner y el futuro del peronismo: unidad y desafíos electorales
A medida que se acerca el cierre de listas, el Partido Justicialista atraviesa un momento crucial en su reorganización interna. Cristina Kirchner retoma el liderazgo del espacio opositor mientras se define la estrategia electoral para enfrentar a Javier Milei. La unidad del peronismo está en disputa, y las tensiones con el sector de Axel Kicillof y la postura de Sergio Massa complican el armado de frentes.
Cristina Kirchner ha vuelto a ocupar el centro de la estrategia política del peronismo, asumiendo el rol de articuladora en el Consejo Nacional del PJ. Su objetivo es consolidar un frente unificado para enfrentar al oficialismo en las elecciones, aunque las diferencias internas dificultan la tarea. Durante su última reunión con dirigentes, se destacó la necesidad de fortalecer la identidad nacional del peronismo, evitando fragmentaciones provinciales que podrían debilitar la candidatura opositora.
Uno de los principales focos de tensión se encuentra en la relación con Axel Kicillof y su sector político. El gobernador bonaerense ha lanzado su propio espacio, "Movimiento Derecho al Futuro" (MDF), con una visión más autónoma, lo que genera fricciones con la estrategia de unidad impulsada por Kirchner. El axelismo pone condiciones para la integración, exigiendo mayor representación en las listas y alineamiento legislativo, lo que ha generado resistencia en otros sectores del PJ.
El llamado que hizo el sábado por la tarde Axel Kicillof desde La Plata, donde lanzó su espacio político, Movimiento Derecho al Futuro (MDF), en el cierre del plenario, el gobernador optó por no fogonear la interna y buscó proyectar amplitud: “Hoy nace el MDF, y como decía el General, el movimiento jamás fue excluyente ni sectario. Es una forma modesta de contribuir, de organizarnos, abrirnos y volver a escuchar y conectar con las necesidades de nuestra gente. Es un movimiento que respeta la diversidad y que viene de abajo hacia arriba. Es con todos los sectores y con participación”, afirmó. Y dejó un mensaje concreto: “El único adversario que tenemos es Javier Milei. Y está afuera, no adentro”. Kicillof también se refirió a las elecciones del próximo 7 de septiembre en la provincia: “Si Milei gana, va a acelerar. Lo que está en juego acá es que la motosierra no cruce la General Paz, que no entre a la provincia de Buenos Aires”, alertó
Por su parte, Sergio Massa insiste en la importancia de un peronismo fuerte y cohesionado para evitar la atomización política. Si la unidad no se concreta, ha dejado abierta la posibilidad de competir con listas propias, lo que podría fragmentar aún más el espacio opositor. La incertidumbre sobre su rol en la futura configuración del Frente Renovador agrega un elemento de inestabilidad al armado general del peronismo.
El desdoblamiento de las elecciones en Buenos Aires también ha sido objeto de debate.
La estrategia inicial apuntaba a diferenciar los comicios provinciales del escenario nacional, pero los cálculos políticos han cambiado y ahora se teme que esta decisión pueda favorecer a los sectores de derecha. Además, la falta de una mesa de negociación formal dentro del PJ bonaerense dificulta la posibilidad de alcanzar una síntesis que garantice competitividad electoral.
El peronismo enfrenta un desafío complejo: lograr un equilibrio entre la unidad y la representatividad de los distintos sectores. Cristina Kirchner apuesta por una estrategia nacionalizada, pero las tensiones internas con el axelismo y la incertidumbre sobre la postura de Massa complican el armado de un frente cohesionado. La decisión final sobre las listas y el esquema electoral definirá si el PJ llega fortalecido o fragmentado a la contienda contra Milei.
El cronograma electoral marca que el próximo 9 de julio deberán presentarse los frentes que competirán en septiembre. El peronismo tiene un mes y nueve días para alcanzar una síntesis, aunque hoy el teléfono entre La Plata y el Instituto Patria sigue cortado. Cristina Fernández de Kirchner sigue de cerca el escenario: revisa sondeos propios, recibe dirigentes, pregunta. Semanas atrás se reunió con los estrategas brasileños de la campaña “Lula Livre” —los mismos que participaron en el tramo final de la campaña de Sergio Massa y que asesoraron al recientemente electo presidente uruguayo, Yamandú Orsi—, los escuchó con atención, pero no les delegó el diseño de su estrategia. “La única que tiene una mirada de mediano y largo plazo para definirla es ella”, afirma la senadora provincial Teresa García.
Fuente: CONSENSO PATAGONICO