Entre salmones y petróleo: la Legislatura se partió en dos
16.12.2025
La 4ª Sesión Ordinaria de la Legislatura de Tierra del Fuego, celebrada el 15 de diciembre de 2025, se convirtió en un espejo de las tensiones que atraviesan la provincia: urgencia económica vs. defensa ambiental, soberanía energética vs. transparencia institucional.
“Entre salmones y petróleo: la Legislatura se partió en dos”
La 4ª Sesión Ordinaria de la Legislatura de Tierra del Fuego, celebrada el 15 de diciembre de 2025, se convirtió en un espejo de las tensiones que atraviesan la provincia: urgencia económica vs. defensa ambiental, soberanía energética vs. transparencia institucional. El oficialismo logró imponer sus dictámenes, pero la oposición instaló un relato de resistencia que promete seguir marcando la agenda política fueguina.
La sesión legislativa fueguina del 15 de diciembre de 2025 no fue una más. En un recinto cargado de tensiones, con suspensiones previas y dificultades para alcanzar el quórum, se discutieron tres temas que condensan las contradicciones del presente provincial: la salmonicultura, el acuerdo YPF–Terra Ignis y el presupuesto institucional.
El clima estuvo marcado por una narrativa de “urgencia vs. transparencia”. El oficialismo, encabezado por el bloque FORJA y aliados, presionó para aprobar acuerdos económicos bajo el argumento de la crisis y la necesidad de recursos para 2026. La oposición, integrada por el Partido Verde, sectores del MPF y Somos Fueguinos, construyó un relato de resistencia, denunciando atropellos ambientales e institucionales.
Salmonicultura: el regreso de un fantasma ambiental
El primer gran eje de discusión fue la salmonicultura, un tema que parecía cerrado desde la sanción de la prohibición en 2021, pero que volvió al recinto con fuerza.
-
Postura en contra (Defensa Ambiental):
La legisladora María Laura Colazo (Partido Verde) y el legislador Pablo Villegas (MPF) lideraron la oposición más férrea. Colazo insistió en que la provincia debe proteger sus recursos naturales y apostar al turismo sustentable, mientras Villegas calificó la iniciativa como una “falta de respeto grave” y denunció que se busca beneficiar a “unos pocos” con una industria “gravemente contaminante” y sin licencia social.
El legislador Jorge Lechman (Somos Fueguinos) se sumó al rechazo, señalando que no se demostró ninguna ventaja real para la provincia y criticando la ausencia de un debate ambiental serio. -
Postura a favor (Desarrollo Productivo):
El bloque oficialista defendió la modificación de la ley como una oportunidad para diversificar la matriz productiva y generar empleo. Aunque sus voceros evitaron discursos encendidos, el dictamen de mayoría reflejó la intención de habilitar la cría intensiva de salmones como fuente de divisas.
La discusión sobre la salmonicultura se convirtió en un símbolo de la tensión entre dos modelos de provincia: uno que prioriza la protección ambiental y el turismo sustentable, y otro que apuesta a la explotación intensiva de recursos para enfrentar la crisis económica.
Acuerdo YPF – Terra Ignis: soberanía energética vs. transparencia
El segundo eje fue el acuerdo entre YPF y Terra Ignis, que implica la cesión de áreas maduras a la empresa estatal provincial.
-
Postura a favor (soberanía energética):
Los legisladores Federico Sciurano y Federico Greve (FORJA) defendieron el acuerdo como una herramienta estratégica. “Esto define cómo la provincia administrará sus recursos a futuro”, señalaron, subrayando que garantiza la continuidad laboral en los yacimientos del Plan Andes y asegura regalías para la provincia. -
Postura crítica (Transparencia):
El legislador Matías Lapadula (Partido Verde) cuestionó la falta de información técnica. Denunció que se les pedía “votar a ciegas” sin conocer el pasivo ambiental ni las condiciones económicas del traspaso. Exigió explicaciones claras antes de comprometer el patrimonio provincial.
Aquí la tensión se expresó en otro binomio: soberanía vs. transparencia. Mientras el oficialismo defendió el acuerdo como un paso hacia la autonomía energética, la oposición alertó sobre los riesgos de comprometer recursos sin información suficiente.
Tensión institucional y presupuesto
El tercer eje fue la propia dinámica institucional.
- El legislador Juan Carlos Pino (PJ), presidente de la sesión, debió ejercer un rol de mediador para evitar nuevas suspensiones y garantizar el quórum. Su gestión fue clave para que la sesión avanzara en medio de un “cortocircuito político” entre los bloques.
- Se produjo la asunción de Luciano Selzer (La Libertad Avanza), quien reemplazó a Agustín Coto. Selzer prometió aportar una visión técnica y “científica” al cuerpo legislativo, lo que generó expectativas sobre su rol en futuros debates.
Cómo quedó la votación
- Salmonicultura: El oficialismo logró aprobar el dictamen de mayoría que habilita la revisión de la prohibición, pese al rechazo de los bloques opositores.
- Acuerdo YPF – Terra Ignis: Fue aprobado con mayoría oficialista, aunque con votos en contra y abstenciones de sectores críticos.
- Presupuesto e institucionalidad: Se aprobaron por mayoría simple, con quórum asegurado tras la incorporación de Selzer.
Reiteración de las ideas fuerza
La sesión del 15 de diciembre de 2025 puede resumirse en tres grandes tensiones:
- Urgencia vs. Transparencia: El oficialismo presionó para aprobar acuerdos económicos bajo el argumento de la crisis y la necesidad de recursos para 2026. La oposición denunció que se votaba sin información suficiente y sin debate ambiental serio.
- Desarrollo Productivo vs. Defensa Ambiental: La salmonicultura volvió a dividir aguas. Para unos, es una oportunidad de empleo y divisas; para otros, un riesgo ambiental y un atropello a la licencia social.
- Soberanía Energética vs. Riesgo Institucional: El acuerdo YPF–Terra Ignis fue defendido como un paso hacia la autonomía, pero criticado por la falta de transparencia y claridad en los términos.
Estas tensiones se repitieron en cada intervención, en cada cruce de palabras, en cada voto. La narrativa de urgencia del oficialismo chocó con la narrativa de resistencia de la oposición.
La 4ª Sesión Ordinaria de la Legislatura fueguina no solo aprobó proyectos: definió relatos políticos. El oficialismo impuso su agenda económica, pero la oposición logró instalar un discurso crítico que denuncia atropellos ambientales e institucionales.
La provincia se debate entre dos caminos:
- Un modelo productivo intensivo, que busca recursos inmediatos para enfrentar la crisis.
- Un modelo sustentable y transparente, que prioriza la protección ambiental y la claridad institucional.
El desenlace aún está abierto, pero la grieta entre urgencia y transparencia promete seguir marcando la agenda política de Tierra del Fuego en 2026.
Fuente: CONSENSO PATAGONICO
