IVA simple: ¿Revolución fiscal o un engaño más?
02.06.2025
El gobierno presenta el IVA Simple como la gran solución para los contribuyentes, prometiendo simplificación, reducción de carga administrativa y menos errores. Sin embargo, detrás de este aparente avance, surgen dudas sobre su impacto real, la centralización del control impositivo y la falta de consulta con los sectores afectados. ¿Es realmente un alivio fiscal o solo una nueva herramienta de recaudación disfrazada de modernización?
IVA simple: ¿Revolución fiscal o un engaño más?
El gobierno presenta el IVA Simple como la gran solución para los contribuyentes, prometiendo simplificación, reducción de carga administrativa y menos errores. Sin embargo, detrás de este aparente avance, surgen dudas sobre su impacto real, la centralización del control impositivo y la falta de consulta con los sectores afectados. ¿Es realmente un alivio fiscal o solo una nueva herramienta de recaudación disfrazada de modernización?
Desde hace años, los contribuyentes vienen enfrentando un sistema tributario que se complica cada vez más, lleno de formularios interminables y procesos engorrosos que requieren ayuda profesional para evitar sanciones inesperadas. La Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA), en su intento de "modernizar" el sistema, lanza el **IVA Simple**, un esquema que promete facilitar la liquidación del impuesto mediante un procedimiento electrónico asistido. Pero ¿hasta qué punto esta simplificación es beneficiosa para quienes deben cumplir con sus obligaciones fiscales?
La propuesta, reglamentada por la **Resolución General 5705/2025**, establece un cronograma de implementación que arranca en junio de 2025 con un período de prueba opcional, pero que será de uso obligatorio a partir de noviembre. El objetivo, según ARCA, es reducir la cantidad de formularios requeridos en un 75%, eliminar la carga manual de datos y lograr un proceso digital más eficiente.
No obstante, la "automatización" plantea interrogantes. **¿Realmente simplifica o solo otorga más poder al ente recaudador?** El nuevo esquema prevé que ARCA centralice la información de los contribuyentes, procesando automáticamente datos de compras y ventas. La pregunta es si el Estado estará realmente preparado para manejar esta gran cantidad de información sin generar más trabas en la gestión impositiva.
Los contadores y expertos fiscales han levantado la voz respecto a las **falencias del sistema**. Si bien el IVA Simple promete beneficios administrativos, la digitalización sin ajustes adecuados puede generar errores que afecten directamente a los pequeños contribuyentes. ¿Qué sucede si los datos procesados por ARCA contienen errores? ¿Qué herramientas tendrá el contribuyente para corregir posibles inconsistencias sin incurrir en sanciones o largas disputas con el organismo?
Por otro lado, **el impacto político** de esta medida no pasa desapercibido. Si bien el gobierno promociona el IVA Simple como un "avance hacia la modernización", la medida se presenta en un contexto de creciente presión fiscal sobre la ciudadanía. Lejos de representar un alivio, algunos sectores consideran que es un nuevo intento del Estado de ampliar su control sobre la actividad económica.
En tiempos donde la carga impositiva ya resulta asfixiante para muchos pequeños comercios, el **IVA Simple podría convertirse en una trampa más**, disfrazada de progreso. La digitalización de los impuestos es una necesidad, pero sin consenso con los sectores afectados, solo profundiza el descontento y la sensación de que cada nuevo cambio es un ajuste más disfrazado de beneficio.
¿Estamos realmente ante una solución fiscal, o simplemente se nos está vendiendo otro paquete de medidas que favorecen al ente recaudador? Esa es la verdadera pregunta que los contribuyentes deberían hacerse antes de celebrar esta nueva iniciativa.
Fuente: CONSENSO PATAGONICO