Los trabajadores de Textil Río Grande en pie de lucha
06.08.2024
Los trabajadores fueron notificados por la empresa de que no dispone de los recursos económicos para seguir pagando los salarios reducidos durante los periodos de suspensiones laborales, lo que podría considerarse un despido.
Los trabajadores de Textil Río Grande en pie de lucha
Los trabajadores fueron notificados por la empresa de que no dispone de los recursos económicos para seguir pagando los salarios reducidos durante los periodos de suspensiones laborales, lo que podría considerarse un despido.
En declaraciones, Walter Hernández, delegado trabajador de Textil-RGA, enfatizó lo siguiente: “la empresa Textil Río Grande admitió en una audiencia en el Ministerio de Trabajo que no tiene dinero para seguir pagando los salarios reducidos, abandonando sus responsabilidades laborales”. También mencionó que “hoy nos presentamos a trabajar y nos encontramos con la fábrica cerrada, sin previo aviso ni justificación”. Agregó además que “vamos a exigir el pago de indemnizaciones y consideraremos acciones legales por despido, ya que la empresa decidió no hacer más acuerdos por suspensiones, dejándonos sin empleo ni futuro”.
Es importante mencionar que los períodos de suspensiones laborales con reducciones en los salarios a los trabajadores de Textil Río Grande comenzaron en diciembre del 2023 y se extendieron hasta el 1 de agosto del presente año, afectando a 65 trabajadores. Además, la empresa sigue ofreciendo planes de “retiro voluntario” a pagar en cuotas, lo que se considera un mecanismo de presión para que los trabajadores acepten la desvinculación laboral sin mayores perjuicios para la empresa.
En el marco de la crisis de la industria textil en la provincia el camino es el rechazo a los despidos y al vaciamiento de las empresas, empresa que cierre o despida debe ser puesta en funcionamiento bajo control de sus trabajadores afectando los recursos de los capitalistas y con la asistencia del Estado. Las patronales buscan desmoralizar a los trabajadores con la complicidad de los gobiernos -provincial y nacional- y la parálisis de las centrales sindicales que negocian artilugios legales cuando lo que corresponde es una acción conjunta de todos los trabajadores textiles y fueguinos contra la grave situación laboral en la provincia.
Fuente: Consenso Patagonico